«Danza del Alma ha sido mi felicidad y mi desvelo, ha sido mi obsesió y mi sufrimiento, ha sido la plenitud y el dolor también».
Ernesto Alejo director de Danza del Alma hace 19 años y
gestor de para Bailar en Casa del trompo, es una de las personas que más ha
impulsado el desarrollo de los procesos culturales en Santa Clara. Apasionado,
incansable y exigente, prefiere a Cuba como techo creativo y brinda a los
santaclareños lo mejor de la danza a nivel nacional e internacional.
«El trabajo ha sido hermoso pero muy duro, fueron 16 años
sin cede. Agradecer siempre la escuela Vocacional de Arte Olga Alonso que nos abrió
las puertas de cinco a doce de la noche, a la Escuela Profesional
de arte. La plenitud vino cuando nos entregaron el Centro de desarrollo de la Danza y el Teatro».
El Centro de desarrollo de la Danza y el Teatro
constituye un espacio no solo para el bien de las artes escénicas sino para el
bien de la ciudad.
«Trabajamos con los niños los domingos y tenemos una galería
dedicada a los Hermanos Vázquez que cumple con todos los requerimientos».
A la Casa
del Trompo se refirió como uno de sus mayores empeños, donde se ha presentado
lo mejor de la danza en Cuba.
«Creo que soy un hombre empuje. Más allá de mi obra quiero
que se recuerde de mi existencia a un hombre intransigente, intolerante, no
solo ante lo mal hecho sino ante lo incomprendido».
«Un hombre adorador de la utopías si son mágicas y que
defendió a ultranza la enseñanza del arte y de la danza y que ha tratado de
explicar muchas veces que la enseñanza del arte y que las escuelas de arte
pueden ser la columna vertebral de la cultura y la revolución cubana».
Por Lisandra Durán
Por Lisandra Durán


0 comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por su comentario